Prueba de triatlón de media distancia en la que se nada 1,9km, se realizan 90km de ciclismo y se corren 21km. Según #triatlonchannel fue la prueba MD con mayor participación del mundo con un total de 3.800 inscrit@s, donde había participantes de hasta 63 nacionalidades distintas. Este precioso MD tuvo lugar en la ciudad de Alcúdia, Mallorca.
La mañana del sábado la temperatura era agradable y el agua estaba perfecta para disfrutarla.
En el primer segmento de natación un hormiguero de gente esperaba su salida. Las salidas eran con “roll-down”, por lo que cada triatleta debía colocarse en el cajón de salida según su tiempo estimado de natación. Como era de esperar, muchos se metieron donde vieron hueco y esto provocó que hubiese gente de diferentes niveles en cada cajón.
De manera muy cauta, decidí ponerme en el cajón de salida de 32’, aunque después comprobé que al ser una natación muy rápida, pude realizar este segmento en 30’, a pesar de ir adelantando grupos de nadadores que, evidentemente no habían acertado en su salida.
Después de una buena transición hecha con calma (4’07”), me subí a la bici, sabiendo que la clave no estaba sólo en el puerto, sino en ganar tiempo en la bajada e intentar mantener un buen ritmo en la otra mitad del segmento ciclista (2h52’41”). El circuito de bici es muy bonito, la subida preciosa, y la bajada del puerto muy técnica y rapidísima! Pero aún quedaba más de la mitad del recorrido, que al contrario de lo que pensaba, estaba lleno repechos, salvo los últimos 15kms que era bastante llano hasta llegar a la T2. ¡Aquí las cabras volaban! No me olvidaré del pueblo de Muro, que haciendo honor a su nombre, nos sorprendió a todos con una pared importante… sólo se escuchaba el sonido de las manetas bajando piños en tiempo record.
La segunda transición la hice muy concentrada (3’13”), sabiendo que me dirigía al último segmento y que no se me podía escapar ni un detalle. Así fue. Deportivas, visera, un gel en un tirante, otro en el otro tirante, un tercero en la mano y, muy TOP, ¡crema solar que te daban los voluntarios! (me salvó la vida).
Ahora si, nada podía fallar. Empecé a correr.
En la carrera a pie ya se empezaba a notar el viento, pero había tanta gente corriendo que te lo iban tapando. Para mi gusto, un circuito perfecto, ya que eran tramos cambiantes, aunque con algo de desnivel. Te llevaban por el paseo marítimo, por la calle, por el puerto, incluso pasabas por encima de un puentecito de madera que mucho me recordó al de nuestro Pinedo…
Me sentía muy cómoda y no paraba de adelantar a alemanes, ingleses, franceses… corrí tanto que conseguí el segundo mejor parcial de carrera a pie de la general de chicas! (1h35’18”), ¡una locura!
Se acercaban los últimos metros de carrera, y sólo hacía que pensar en toda la gente que me ha apoyado siempre y me había dado los ánimos de último momento (esos videos divertidos me dieron un gran empujón). Sabía que no me esperaban en la meta pero llevaba a la marea morada en mi cabeza, y me habían ayudado a cruzar la meta.(5h05’17”).
Una lástima la asignación de “slots” que, con un cuestionable sistema de reparto en las plazas que quedaron vacantes, me quedé a las puertas de clasificarme para el campeonato del mundo en Sudáfrica (al que finalmente Jose si que irá, ¡enhorabuena!).
Obviamente los entrenamientos han sido muy duros (ya sabéis.. ¡la vara de José llega hasta el Priorat!!) pero cumpliendo y disfrutando de estos, he logrado dar el máximo en mi gran objetivo esta temporada, el 70.3 Mallorca. Finalmente MUY CONTENTA por los resultados obtenidos.
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